LUNA

 Cuando la luna me mira siento una familiar conexión extraña a mi, es un sentimiento fuera de mi persona, no es mi cuerpo quien siente, es mi ser, creo que esta conexión sobrehumana es común pero difícil de replicar. 

Nunca en ningún lugar creo llegar a encontrar la relación que tengo con la Luna, esta omnipotente protección que solo la Luna y el Sol son capaces de proveer, sin embargo, el sol decide quemar, el sol decide hervir y explotar, mientras (...) la Luna, la Luna solamente nos observa, con cuidado desde todos los ángulos posibles, en ninguna estación más que en otra, a veces incluso después de una noche fría, se deja ver en las primeras horas de la mañana, recordándonos que a pesar de la aparente soledad ella no nos dejó, se aseguró de limpiarnos y recargarnos con su luz. 

No nos dejó, ni lo hará nunca, pues orbita entorno a los nocturnos, nunca nos suelta a su eje de gravedad.